La playa Ermitaño se encuentra ubicada en el pueblo El Limón de las terrenas en la península de Samaná, específicamente entre Punta de Leche y Punta Cayita Honda, cuenta con aproximadamente 400 metros de longitud y está rodeada de arrecifes.
Su acceso es muy complicado, se puede acceder a ella a pie, tras una larga caminata entre una vegetación bastante espesa y con mucho calor. Pero sin duda alguna es un esfuerzo que realmente vale la pena.
Otra opción más rápida para acceder a ella es en lancha, es tan emocionante y llena de aventura como la anterior, ya que el contacto con la naturaleza es más notoria caminando entre esos senderos.
Esta playa se bautizó con este nombre según a una famosa historia muy conocida entre los lugareños. Una historia bastante fascinante, la cual trata acerca de un pirata francés llamado Juan el Ermitaño, el cual un día desembarco en esta playa, quedándose totalmente solo y aislado del resto del mundo.
Fue alrededor del año 1780 y tras cerca de 22 años de estar en la completa soledad fue descubierto por sus antiguos compañeros de travesías que lo habían creído muerto.
Su historia conmovió a los locales y a los españoles que eran la autoridad en la isla y le otorgan el perdón por todas las fechorías que realizo durante su época de corsario.
Pero de seguro el Juan el Ermitaño no lo paso tan mal en este paraíso terrenal de aguas cristalinas y arenas blancas y suave oleaje, que es prácticamente una piscina natura, además de que contrasta con acantilados y montañas con abundante vegetación, lo que la convierte en un santuario de paz y relajación, alejado de las grandes metrópolis.
Otro de los atributos de Playa Ermitaño, es que desde ella se obtiene una vista panorámica del parque nacional Cabo Cabrón.
SI quieres estar en contacto pleno con la naturaleza y además de experimentar un poco lo que tuvo que vivir este conocido pirata, pues visita Playa el Ermitaño. Te aseguro que lo disfrutaras.